viernes, 27 de febrero de 2009

Biografías


Hoy se cumple el aniversario de los nacimientos de Espartero y Sorolla, dos de los personajes más interesantes del XIX español. Ambos tuvieron biografías e intereses muy distintos, pero resulta muy recomendable buscar información sobre cualquiera de los dos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Jesús, te envío información sobre Joaquin Sorolla.
Un saludito y happy week end.

Lourdes.


Joaquín Sorolla
Valencia, 1863 - Cercedilla, 1923

Joaquín Sorolla y Bastida era hijo de Joaquín Sorolla, comerciante de Cantavieja (Teruel) afincado en Valencia, y de Concepción Bastida, nacida en Valencia. En 1865 mueren los padres víctimas de una epidemia de cólera. Al quedar huérfanos Joaquín y su hermana Concha son recogidos por la hermana de la madre, Isabel Bastida, casada con el cerrajero José Piqueres.

Sorolla estudió en la Escuela de Artesanos de Valencia y posteriormente en la de Bellas Artes de San Carlos. Durante su época de estudiante conoce al fotógrafo Antonio García, que se convierte en su protector y con cuya hija, Clotilde, se casa en 1888. Entre 1889 y 1895 nacen sus tres hijos, María, Joaquín y Elena. En 1884 gana una pensión de la Diputación de Valencia para estudiar en Italia, donde vive desde 1885 a 1889. En 1890 se instala en Madrid. A partir de ese momento y hasta 1900 pone en marcha un activo plan de promoción profesional participando en gran número de exposiciones nacionales e internacionales.
En 1900 gana una medalla de honor en la Exposition Universelle de París junto a Hener, Kröyer, Zorn, Sargent, Ochardson, Corinth, Israëls, Lembach, Stuys, Alma Tadema, Thoulow, Seraf, Whistler y Klimt. A partir de este momento estrecha su amistad con alguno de ellos, particularmente con Zorn, Sargent y Kröyer. Desde 1905 empieza a planificar una serie de grandes exposiciones individuales, avaladas por importantes marchantes y galerías.
La primera de estas exposiciones se celebra en 1906 en la Galerie Georges Petit de París, coincidiendo con la que celebraba Zorn en la Galerie Durand-Ruel. Sorolla se convierte en la gran figura de la temporada de París, lo que significaba su consagración definitiva en Europa. Tras este éxito la Galerie Schulte le organiza, durante 1907, una serie de exposiciones en Berlín, Colonia y Düsseldorf. El éxito de crítica y de ventas en esta exposición fue escaso. En 1908 intenta otra exposición individual en la Grafton Gallery de Londres, organizada por los marchantes Chesser Mundy y Holt y apoyada por los pintores Beruete y Sargent. La poca habilidad en la promoción de esta exposición hace que la recepción sea controvertida. En 1909 y 1911 realiza exposiciones en diversas ciudades de Estados Unidos avaladas por el hispanista Archer M. Huntington, que se convierte en su gran protector, y le encarga la decoración de la biblioteca de la Hispanic Society de Nueva York con escenas de diferentes regiones españolas.
Para realizar este encargo Sorolla viajó infatigablemente por España, actividad que va minando su salud hasta que en 1920 sufre un ataque de hemiplejia que le imposibilita seguir trabajando hasta su muerte tres años después.

Anónimo dijo...

Baldomero Espartero
(Baldomero Espartero, conde de Luchana, duque de la Victoria y príncipe de Vergara) Militar y político español (Granátula, Ciudad Real, 1793 - Logroño, 1879). Hijo de un carretero de La Mancha, adoptó el segundo apellido de su padre (pues su nombre completo sería Baldomero Fernández Álvarez Espartero). Al estallar la Guerra de la Independencia (1808-14) abandonó la carrera eclesiástica y tomó las armas. Desde 1810 permaneció en el Cádiz sitiado por los franceses, donde se estaban desarrollando las Cortes constituyentes; allí realizó sus primeros estudios militares.
Entre 1815 y 1824 estuvo destinado en América, donde combatió contra los independentistas hasta que España perdió sus colonias en el continente; aunque no participó en la decisiva batalla de Ayacucho, en el futuro sus partidarios serían conocidos popularmente como los ayacuchos en recuerdo del pasado americano de Espartero y de la influencia que sobre sus ideas políticas tuvieron otros militares liberales de aquella campaña.
Al morir Fernando VII, se decantó por el apoyo a la causa de Isabel II y de la regente María Cristina, en virtud de sus convicciones constitucionales. Luchó contra la reacción absolutista en la Primera Guerra Carlista (1833-40), en la que desempeñó un papel destacado: sus éxitos militares le llevaron de ascenso en ascenso hasta obtener el mando del ejército del Norte a raíz del motín de los sargentos de La Granja (1835). Rompió el cerco carlista de Bilbao venciendo en la batalla de Luchana (1836); organizó la defensa de Madrid frente a la expedición de don Carlos (1837); y aprovechó las disensiones en el bando carlista para atraerse al general Maroto y negociar con él la paz que sellaron ambos con el «abrazo de Vergara» (1839). Luego se dirigió al Maestrazgo, donde venció a Cabrera en 1840, poniendo fin a la guerra.
Desde entonces puso su prestigio al servicio de sus ideales políticos progresistas. Se enfrentó al conservadurismo de María Cristina haciendo que ésta le nombrara presidente del Consejo de Ministros en 1840-41; pero, ante la resistencia de la regente al programa liberal avanzado que defendía, exigió a ésta que abdicara e hizo que las Cortes le nombraran regente a él mismo (1841-43).
Completaba así la ascensión social que, desde un origen modestísimo, le había llevado a ser conde, duque, grande de España y, finalmente, regente. El «espadón» progresista se enemistó con muchos de sus partidarios, a causa de su modo de gobernar autoritario, personalista y militarista; en 1843 se vio obligado a disolver unas Cortes que se le habían vuelto hostiles.
Un pronunciamiento conjunto de militares moderados y progresistas (encabezados por Narváez y Serrano) le arrebató el poder en aquel mismo año; pronto se declararía mayor de edad a Isabel II y comenzaría una década de predominio conservador. Espartero se exilió en Inglaterra, de donde regresó en 1849 para vivir retirado en Logroño.
Ante el deterioro político del final de la década moderada (1844-54), las tendencias autoritarias de la reina y la hegemonía política de la minoría ultraconservadora, se produjo una nueva revolución en 1854, que llevó a Espartero a la presidencia del Gobierno; durante el siguiente «bienio progresista» (1854-56) avaló el reformismo de los liberales avanzados, pero no pudo evitar que se reprodujeran las mismas disensiones acerca de su liderazgo.
De nuevo fue expulsado del poder por un pronunciamiento encabezado por su antiguo aliado, el general O’Donnell, tras el cual vino un nuevo periodo de ostracismo político de los progresistas, que Espartero contempló pasivamente desde su retiro de Logroño. Allí recibió, tras la revolución que destronó a Isabel II en 1868, la oferta de Prim de hacerle elegir por las Cortes rey constitucional de España, oferta que rechazó. Tras la coronación de Amadeo de Saboya éste completó el encumbramiento honorífico de Espartero nombrándole príncipe de Vergara con tratamiento de alteza real.



Joaquín Sorolla
Cuando apenas contaba con 2 años de edad, fallecieron sus padres de una epidemia. Al quedar huérfanos, su hermana Eugenia y él, su tía Isabel, hermana de su madre, y su marido, de profesión cerrajero, los recogieron. Pasados los años intentaron enseñarle, en vano, el oficio de la cerrajería, advirtiendo pronto que su verdadera vocación era la pintura.
En 1874 empezó a estudiar en la Escuela Normal Superior donde le aconsejaron que también se matricularse en las clases nocturnas de dibujo en la Escuela de Artesanos. En ésta última recibió, en 1879, una caja de pinturas y un diploma como premio «por su constante aplicación en el dibujo de figura». Ese mismo año ingresó en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos a la par que trabajaba en el taller de su tío, el cual estudió junto a pintores como Manuel Matoses, Benlliure o Guadalajara.
Fue en la Academia de San Carlos donde conoció a otro alumno, Juan Antonio García, hermano de quien más tarde acabaría siendo su esposa, Clotilde García. En 1880 consiguió una Medalla de Plata por su obra Moro acechando la ocasión de su venganza en la exposición de la sociedad El Iris.
Al acabar su formación, comenzó a enviar sus obras a concursos provinciales y exposiciones nacionales de bellas artes, como la de Madrid en mayo de 1881, donde presentó tres marinas valencianas que pasaron sin pena ni gloria pues no encajaban con la pintura oficial, de temática histórica y dramática. Al año siguiente, estudió la obra de Velázquez y otros autores en el Museo del Prado, etapa Realista, de la que era su profesor Gonzalo Salva. Por fin, en 1883, consiguió una medalla en la Exposición Regional de Valencia y, en 1884, alcanzó la gloria al conseguir la Medalla de Segunda Clase en la Exposición Nacional gracias a su obra Defensa del Parque de Artillería de Monteleón, obra melodramática y oscura hecha expresamente para la exposición; tal y como le dijo a un colega suyo: “Aquí, para darse a conocer y ganar medallas, hay que hacer muertos.”
Cosechó otro gran éxito en Valencia con su obra El crit del palleter sobre la Guerra de la Independencia. De esta manera, fue pensionado por la Diputación Provincial de Valencia para viajar a Roma donde, a la vez que trabajaba, conoció el arte clásico y renacentista, así como los grandes museos, contactando, además, con otros artistas.
Con su amigo el pintor Pedro Gil se desplazó a París durante el primer semestre de 1885, viviendo de cerca la pintura impresionista que produjo en él, ya de regreso en Roma, variaciones en su temática y estilo, llegando a pintar el cuadro religioso El entierro de Cristo, con el que no tuvo el éxito esperado, donde se introduce en el Naturalismo y toma contacto con las vanguardias europeas, destacando las obras de los pintores John Singer Sargent, Giovanni Boldini y Anders Leonard Zorn.
Trata de blancas (1894). El autor ha de adaptarse al realismo social, dominante en los certámenes de la época. Para ello, mantiene su temática costumbrista, siendo los títulos los que aportarán la denuncia social.
En 1888 contrajo matrimonio con Clotilde García en Valencia, pero vivirían un año más en Italia, esta vez en la localidad de Asís. En 1889 se instalaron en Madrid y, en apenas cinco años, Sorolla alcanzó cierta fama y prestigio como pintor. En 1894 viajó de nuevo a París, donde desarrolló el luminismo, que sería característico de su obra a partir de ahora. Comenzó a pintar al aire libre, dominando con maestría la luz y combinándola con escenas cotidianas y paisajísticas de la vida mediterránea. En obras como La vuelta de la pesca, La playa de Valencia o Triste herencia, describió el sentimiento que producía la visión del mar Mediterráneo, comunicando el esplendor de una mañana de playa con un colorido vibrante y un estilo suelto y vigoroso. Con Triste herencia recibió, en 1900, el Grand Prix en el certamen internacional de París. Además siguió con su pintura de denuncia social que tantos éxitos le había reportado en los últimos años con obras como Y aún dicen que el pescado es caro (1895).
Por aquel entonces, Valencia le nombró hijo predilecto y meritorio, y le fue dado su nombre a una calle. Tras muchos viajes por Europa, principalmente Inglaterra y Francia, celebró una exposición en París con más de medio millar de obras, que le dio un reconocimiento internacional inusitado, conociéndose su obra pictórica por toda Europa y América. Expuso su obra en Nueva York en 1909 y cosechó un éxito sin precedente alguno, con obras como Sol de tarde o Nadadores, entre muchas otras. También lo hizo, en 1911, en el Museo de Arte de San Luis y en el Art Institute de Chicago. En noviembre de ese mismo año, firmó un encargo para la Hispanic Society of America por el que realizaría catorce murales que decorarían las salas de la institución. Con esta obra, realizada entre 1913 y 1919 y de tres metros y medio de alto por setenta metros de largo, alzó un imborrable monumento a España, pues en ella se representaban escenas características de diversas provincias tanto españolas como portuguesas. Necesitó de casi todo 1912 para viajar por todo el territorio, realizando bocetos y trabajos de costumbres y paisajes. De esta obra destacan los óleos pintados en 1916 dedicados a niños y mujeres en las playas de Valencia, donde predomina la libertad de pincelada y la luz de su tierra. Algunos ejemplos son Madre e hija o Pescadora valenciana. También destacaba, fuera de esta temática, su inconmensurable lienzo Visión de España.
Otra importante faceta suya fue la de retratista, de figuras importantes como fueron Juan Ramón Jiménez, el rey Alfonso XIII, Vicente Blasco Ibáñez, Ortega y Gasset, etc. También, en 1914, había sido nombrado académico y, cuando terminó los trabajos para la Hispanic Society, trabajó como profesor de composición y color en la Escuela de Bellas Artes de Madrid. Su pintura representó la aplicación directa del luminismo al paisaje y la figura, acercando por tanto esta tendencia a la sociedad de la época.
En 1920, mientras pintaba el retrato de la señora Pérez de Ayala en el jardín de su casa en Madrid, padeció un ataque de hemiplejía que mermó drásticamente sus facultades físicas y mentales. Murió en su casa de Cercedilla el 10 de agosto de 1923.

Obras
Etapa de formación (1863-1886)
• Marina (1880).
• Moro con naranjas (1885-1886).
Etapa de consolidación (1889-1899) [Los guitarristas, costumbres valencianas (1889).
• La fuente, Buñol (1890-1895).
• El pillo de playa (1891).
• Trata de blancas (1894).
• Aún dicen que el pescado es caro (1894).
• Madre (1895).
• Una investigación (1897).
• La comida en la barca (1898).
• Cordeleros de Jávea (1898).
• Triste Herencia (1899)
Etapa de culminación (1900-1910)
• Noria, Jávea (1900).
• Retrato de Beruete (1902).
• Mar y rocas de San Esteban, Asturias (1903).
• A la sombra de la barca, Valencia (1903-1904).
• Autorretrato (1904).
• Mis hijos (1904).
• El niño de la barquita (1904).
• Nadadores, Jávea (1905).
• Instantánea, Biarritz (1906).
• María Guerrero (1906).
• Tormenta sobre Peñalara, Segovia (1906).
• Saltando a la comba, La Granja (1907).
• Fuente del Alcázar de Sevilla (1908).
• Pescadora con su hijo, Valencia (1908).
• Paseo a orillas del mar (1909).
• Niños en la playa (1910).
• Clotilde con traje de noche (1910).
• Bajo el toldo, plaza de Zarauz (1910).
Etapa final (1911-1920)
• Después del baño (1911).
• Fifth Avenue, Nueva York (1911).
• La siesta (1911).
• Castilla: la Fiesta del Pan. Ciclo de las regiones de España para la Hispanic Society de Nueva York (1911-).
• Tipos del Roncal (1912).
• Pescadoras valencianas (1915).
• La bata rosa (1916).
• El patio de Comares, la Alhambra de Granada (1917).
• Rompeolas, San Sebastián (1917-1918).
• Joaquín Sorolla y García sentado (1917).
• Retrato de Raquel Meller (1918).
• Alberca del Alcázar de Sevilla (1918).
• Jardín de la casa Sorolla (1918-1919).
• Ayamonte (1919).
• Helena en la cala de San Vicente, Mallorca (1919).
• Jardín de la casa Sorolla (1920).
• Retrato de la señora de Pérez de Ayala (1920).

Anónimo dijo...

BUENOS DÍAS...JESÚS

EL 1º
Joaquín Baldomero Fernández-Espartero Álvarez de Toro (Granátula de Calatrava (Ciudad Real), 27 de febrero de 1793 - † Logroño, 8 de enero de 1879).

(Regente del Reino, Príncipe de Vergara y Duque de la Victoria.)

Fue Combatiente en tres de los cuatro conflictos más importantes de España en el siglo XIX, fue soldado en la guerra contra la invasión francesa, oficial durante la guerra colonial en el Perú y General en Jefe en la guerra civil.

-Convencido de que su destino era gobernar a los españoles, fue por dos veces Presidente del Consejo de Ministros y llegó a la Jefatura del Estado como Regente durante la minoría de edad de Isabel II. Ha sido el único militar español con tratamiento de Alteza Real y, a pesar de todas sus contradicciones, supo pasar desapercibido los últimos veintiocho años. Rechazó la Corona de España y fue tratado como una leyenda desde bien joven.

= La Patria cuenta con vuestros esfuerzos,
con vuestras virtudes, con vuestra sabiduría,
para que hagáis leyes que afiancen sus derechos y
destruyan los abusos que se han introducido en el gobierno
del Estado. Hacedlas; que la Reina tendrá una
gran satisfacción en aceptarlas, y la Nación en obedecerlas.

En cuanto a mí, señores, yo las obedeceré siempre,
porque siempre he querido que se cumpla la voluntad
nacional, y porque estoy convencido de que
sin la obediencia a las leyes, la libertad es imposible.=

ESPARTERO EN UNA SESIÓN DE LAS CORTES CONSTUYENTE EL 28 NOVIEMBRE DE 1854.

Aqui te dejo su hoja de servicio militar a lo largo de su trayectoria.


1809 1 de noviembre Soldado Distinguido
1812 1 de enero Subteniente
1814 2 de septiembre Teniente
1816 9 de septiembre Capitán
1817 1 de agosto Segundo Comandante
1821 26 de febrero Comandante
1822 23 de marzo Coronel Graduado de Infantería
1823 1 de febrero Coronel Efectivo de Infantería
1823 9 de octubre Brigadier
1834 17 de febrero Mariscal de Campo
1836 21 de junio Teniente General
1838 1 de mayo Capitán General

EL 2º...

Joaquín Sorolla y Bastida (Valencia, 27 de febrero de 1863 - Cercedilla, 10 de agosto de 1923), fue un pintor y artista gráfico español. Fue uno de los pintores españoles más prolíficos, con más de 2.200 obras catalogadas.

Cuando apenas contaba con 2 años de edad, fallecieron sus padres de una epidemia. Al quedar huérfanos, su hermana Eugenia y él, su tía Isabel, hermana de su madre, y su marido, de profesión cerrajero, los recogieron. Pasados los años intentaron enseñarle, en vano, el oficio de la cerrajería, advirtiendo pronto que su verdadera vocación era la pintura

En 1874 empezó a estudiar en la Escuela Normal Superior donde le aconsejaron que también se matricularse en las clases nocturnas de dibujo en la Escuela de Artesanos. En ésta última recibió, en 1879, una caja de pinturas y un diploma como premio «por su constante aplicación en el dibujo de figura». Ese mismo año ingresó en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos a la par que trabajaba en el taller de su tío, el cual estudió junto a pintores como Manuel Matoses, Benlliure o Guadalajara.

Fue en la Academia de San Carlos donde conoció a otro alumno, Juan Antonio García, hermano de quien más tarde acabaría siendo su esposa, Clotilde García. En 1880 consiguió una Medalla de Plata por su obra Moro acechando la ocasión de su venganza en la exposición de la sociedad El Iris.

En 1883, consiguió una medalla en la Exposición Regional de Valencia y, en 1884, alcanzó la gloria al conseguir la Medalla de Segunda Clase en la Exposición Nacional gracias a su obra Defensa del Parque de Artillería de Monteleón, obra melodramática y oscura hecha expresamente para la exposición; tal y como le dijo a un colega suyo: “Aquí, para darse a conocer y ganar medallas, hay que hacer muertos.”

Con su amigo el pintor Pedro Gil se desplazó a París durante el primer semestre de 1885, viviendo de cerca la pintura impresionista que produjo en él, ya de regreso en Roma, variaciones en su temática y estilo, llegando a pintar el cuadro religioso El entierro de Cristo, con el que no tuvo el éxito esperado, donde se introduce en el Naturalismo y toma contacto con las vanguardias europeas, destacando las obras de los pintores John Singer Sargent, Giovanni Boldini y Anders Leonard Zorn.

En 1888 contrajo matrimonio con Clotilde García en Valencia. En 1889 se instalaron en Madrid y, en apenas cinco años, Sorolla alcanzó cierta fama y prestigio como pintor.En 1894 viajó de nuevo a París, donde desarrolló el luminismo, que sería característico de su obra a partir de ahora.

Con Triste herencia recibió, en 1900, el Grand Prix en el certamen internacional de París. Además siguió con su pintura de denuncia social que tantos éxitos le había reportado en los últimos años con obras como Y aún dicen que el pescado es caro (1895).

Por aquel entonces, Valencia le nombró hijo predilecto y meritorio, y le fue dado su nombre a una calle.Expuso su obra en Nueva York en 1909.También lo hizo, en 1911, en el Museo de Arte de San Luis y en el Art Institute de Chicago.También, en 1914, había sido nombrado académico y, cuando terminó los trabajos para la Hispanic Society, trabajó como profesor de composición y color en la Escuela de Bellas Artes de Madrid.

En 1920, mientras pintaba el retrato de la señora Pérez de Ayala en el jardín de su casa en Madrid, padeció un ataque de hemiplejía que mermó drásticamente sus facultades físicas y mentales. Murió en su casa de Cercedilla el 10 de agosto de 1923.

Anónimo dijo...

Buen trabajo Lourdes, Javi, Borja, y también Inma (aunque no lo publiquemos)